Números en situaciones para practicar los principios del conteo.

Utilizar los números en situaciones variadas que implican poner en práctica los principios del conteo es quizá una de las competencias con más actividades en preescolar. También parece ser una de las más fáciles de atender con una hoja didáctica. ¿Será?

Hoy dedico esta entrada a la clásica actividad de contar colecciones y escribir el número.
Sí, lo sé, como ésas  hay miles, no exagero, miles en la la web. ¿Entonces porque tomarse la molestia?

Bueno, porque hace tiempo descubrí un grave error que cometemos al abordar este tema y hoy me gustaría compartir un par de fichas que tal vez te ayuden a corregirlo un poco.

¿Te interesa?, entonces ¡sígueme!



¿Qué opinas del siguiente diálogo?

- Cuenten las burbujitas que tiene cada pecesito y escriban el número abajo. 
- ¿Así miss?
- No Daniel, fíjate bien: este pecesito tiene dos, ¿cómo es el dos? 
- ¿Cómo un pato?
- Sí, como un patito, a ver vamos a dibujarlo. Así ¡muy bien! 
- ¿Cuál pecesito tiene más burbujas?
- ¡El que tiene siete!
- Bien, ahora píntenlo de rojo. 

¡Qué tal!, ¿te sonó familiar?

Esto fue más o menos lo que viví la primera vez que apliqué esta ficha y en verdad me sentí muy satisfecho; la competencia a trabajar era:

Utiliza los números en situaciones variadas que implican poner en práctica los principios del conteo.

Daniel habia realizado varios conteos y seguro recordaría también cómo hacer el número dos. ¡Misión cumplida!

Pero ¡oh sorpresa!, poco tiempo después Irma Fuenlabrada me mostró a través de un ensayo que publicó la Secretaría de Educación Pública, (puedes descargarlo aquí) todas las oportunidades que dejé de aprovechar en una actividad como la anterior.

Resulta que estaba tan ocupado con el conteo, que olvidé un componente fundamental de la competencia: Las actitudes. Sí, olvidé adecuar mi propuesta para propiciar actitudes matemáticas básicas como la búsqueda de solución a un problema.

Veamos la siguiente ficha:

Ahora el diálogo:

- ¡Vamos a encontrar el pecesito que hizo más burbujas!
- ¿Por qué miss?
- Porque lo vamos a pintar de rojo, tal vez hasta le demos un premio. A ver escojan a su pecesito. ¿Ya lo tienen?
- Sí, yo escogí al que tiene más.
- Bien Valeria, ¿cómo sabes que tiene más?
- Pues porque llegan hasta arriba, mire hasta la rayita.
- Yo escogí éste miss, ¿pero el mio no ganó?
- Todavía no sé Jacob, ¿cómo podemos saber quién ganó?
- ¿Y si cuento las burbujas?
- Bueno Ana, ¿quieren contar las burbujas del pecesito de Ana?...  

Hasta aquí le dejo. ¿Notaste una diferencia con la primera actividad?

Es común pensar que si no les decimos que hacer, los niños no son capaces de enfrentar un problema. Pero esta es una idea equivocada. El sentido de la competencia radica en movilizar los conocimientos, habilidades y actitudes para resolver una situación. No importa si el niño la resuelve o no, lo importante en este proceso de su formación es desarrollar en él la curiosidad por buscar alternativas, el interés por resolver un problema y la disposición para colaborar cuando haga falta.

Cuando decimos a los niños vamos a contar, les estamos quitando la oportunidad de entender el valor y la utilidad de hacerlo. Cierto es que siempre será necesaria la practica y la repetición para aprender a contar 1,2,3... Pero eso sólo representa el conocimiento, la competencia sólo se manifiesta cuando movilizamos también a los otros dos componentes.

Bueno, espero no haberme puesto muy académico y que tu bostezo sea porque me estás leyendo a las 12:30, mientras te tomas un café después de preparar el material para tu próxima clase.

Y hablando de material, te dejo una ficha más. Esta vez como un reto.

Después de saber lo que sabes, ¿cómo trabajarías esta ficha?

Déjame una idea en los comentarios, o mejor aún mándame un correo así podemos conversar más agusto ja, ja.

Saludos y hasta la próxima.